Si visitas Tailandia, un excelente complemento a la visita de Bangkok, es desplazarte a las provincias del norte, donde se encuentran Chiang Rai y Chiang Mai, antiguas ciudades sagradas.
En la ciudad de Chiang Rai, un lugar que no puedes dejar de visitar, es el original templo de Wat Rongkun. De estilo tradicional pero contemporáneo, es un santuario blanco, totalmente recubierto de cristales, que lo hacen parecer una joya deslumbrante bajo los rayos del sol. En su interior, encontrarás pinturas surrealistas de personajes famosos del mundo del arte y del cine, lo cual es divertido, ya que se rompe un poco la formalidad acostumbrada en estos recintos.
En las cercanías de Chiang Rai, una visita muy interesante son las plantaciones de té de Mae Salong. Considerado uno de los mejores del mundo, es lo que nosotros conocemos como te verde, pero con un aroma y sabor delicioso y único. Conoce estos campos color verde esmeralda, que se crearon como una alternativa al antiguo negocio del opio, lo que hizo famoso al Triangulo de Oro, región fronteriza de Tailandia, Birmania y Laos.
Otra visita fascinante, también en los alrededores de Chiang Rai, es Elephant Valley, un santuario de elefantes rescatados del cautiverio, que ya no pueden regresar a vivir al estado salvaje, pero que ahí se les da una vida digna, en libertad dentro del parque. Convive con ellos, conoce sus hábitos y enamórate de estos gigantes tan nobles y tiernos, que han sido compañeros del hombre en esta región desde hace milenios.
En la vecina ciudad sagrada de Chiang Mai, nuestra recomendación obligada es el espectacular templo Wat Phra That Doi, el más famoso y sagrado de Tailandia, que data del año 1383! Está ubicado en lo alto de una colina y se accede a él subiendo sus 306 escalones, pero el esfuerzo vale la pena, ya que cuando llegues a la cima, quedarás deslumbrado con la fabulosa estupa dorada gigante que lo preside y los lujosos acabados del templo, de fondo blanco con decoraciones en oro y dragones rojos. En el interior, podrás admirar el Buda Esmeralda, delicada escultura realizada en cristal verde, única en el mundo.